Cartas de lectores: El Poder Judicial que tenemos, el cuarto juez, educación

Carta de la semana

El Poder Judicial que tenemos

La actuación de la jueza Julieta Makintach en el juicio por la muerte de Diego Maradona es una muestra más de por qué el Poder Judicial goza de nula credibilidad en la sociedad. La descarada utilización de recursos públicos para un ejercicio de promoción personal de esa magistrada, denunciada en el editorial del 20 de mayo, no es un hecho aislado. Nos enteramos todos los días de fiestas colosales realizadas por fiscales o jueces cuyo costo excede notoriamente el salario que cobran mensualmente. La sociedad civil se entera todos los días de actos de corrupción perpetrados por integrantes del Poder Judicial y asociaciones ilícitas en las que participan jueces, fiscales y narcotraficantes. Si ante la desidia del Consejo de la Magistratura, que mira para otro lado sin juzgar y eventualmente remover a los jueces que incurren en hechos delictivos, la sociedad sigue tolerando estos hechos sin movilizarse para que cambie esta situación, obviamente seguiremos teniendo un Poder Judicial invadido por la corrupción e inservible como hasta ahora.

Enrique Javier Martorell

DNI 10.964.0888

El cuarto juez

El abrupto final con el que ha concluido este primer juicio seguido contra los profesionales que atendieron en su lecho de muerte a Diego Armando Maradona –tras la desintegración del tribunal a raíz de la incalificable conducta de una de sus integrantes– ha sido la única solución jurídicamente válida en un sistema de enjuiciamiento en el que, como en el caso, rige plenamente la oralidad y con ello la bien denominada inmediación. Cabe recordar que, más allá de la percepción personal de la prueba por parte de los juzgadores, de su valoración y la ponderación de los alegatos verbales de los intervinientes, no existen otros registros que puedan sustituir el conocimiento de un nuevo magistrado que se incorpore al colegio judicial en suplencia de quien, como aquí sucedió, ha sido recusado, con lo que este hipotético arbitrio resulta inviable. La cuestión habría sido diferente si el tribunal de juicio se hubiese integrado con un cuarto juez, que es aquel que en previsión de eventuales contingencias se incorpora al oficio judicial con el mismo deber de asistencia de los jueces naturales, pero sin ejercer funciones propiamente jurisdiccionales aunque con derecho, sí, de formular preguntas, al igual que los otros vocales. En materia de casos complejos se acudió, por ejemplo, en el orden nacional, a la figura del cuarto juez, al amparo de lo prescripto por la ley 25.770, que previó la intervención en este tipo de proceso de lo que dio en llamar juez sustituto en el juicio sustanciado con motivo de los hechos ocurridos a raíz de la renuncia del presidente Fernando de la Rúa en diciembre del año 2001. Aquí, según recuerdan los memoriosos, el tribunal federal interviniente tomó la precaución de nombrar a un cuarto juez, que finalmente debió asumir al incapacitarse uno de sus miembros, salvando así la continuidad del procedimiento en el que en su hora se condenó, en discutido pronunciamiento, a los por entonces jefe de la Policía Federal y secretario de Seguridad de la Nación. La ausencia de disposición normativa no debió ser obstáculo para suplir en este frustrado primer juicio la imprevisión del Tribunal Oral en lo Criminal N° 3 de San Isidro, pues las facultades reglamentarias y de superintendencia debieron superar la laguna legal.

Miguel A. Almeyra

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Educación

Qué linda clase de educación la que le dio Ricardo Darín al ministro Caputo. Cual compadrito de arrabal, el Sr. Caputo se hizo el gracioso provocando a un excelente actor. ¿Qué necesidad tienen muchos miembros del actual gobierno, incluso el Presidente, de denostar y tratar mal a cualquiera que ose opinar sobre lo que fuere y discrepe en algo? ¿No se dan cuenta de que la divergencia de criterios construye? Actúan como los patoteros del anterior gobierno, que se conducían de la misma manera. La única diferencia es que los actuales no se autodefinen peronistas y, por otra parte, declaman su amor por la libertad, que entre otras características lleva la de aceptar el disenso.

Sr. Caputo, respete al ciudadano común sin hacerse el canchero, tarde o temprano lo tratarán a usted de la misma manera. Uno cosecha lo que siembra.

Rafael Martínez de Sanzo

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Hospital Garrahan

Invito a los medios y otros argentinos de bien a que, en lugar de discutir el precio de las empanadas, pongan su mirada (y corazón) en lo que se está viviendo en el Hospital Garrahan. Un médico ya recibido que está haciendo su residencia gana menos de 3000 pesos la hora. Los médicos de planta, con años de especializaciones y experiencia, trabajando en áreas críticas, ganan 10.000 la hora y en este momento ven triplicado su trabajo por las renuncias de colegas que se van a trabajar a otro lado. Además de tremendamente injusto, esto no es humano. ¡Con la salud de nuestros niños no! (y la de nuestros pediatras tampoco).

Denise Norris Gallagher

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El “Señor” Moreno Hueyo

Con mucho agrado, y todavía un dejo de tristeza, leímos el miércoles último la semblanza sobre nuestro padre, Guillermo, quien partió al encuentro del Señor y de nuestro hermano Guillo el 27 de mayo pasado, después de mucho tiempo de llevar con entereza y una enorme alegría una larga enfermedad que nunca lo privó de disfrutar la vida. Queremos expresar con estas líneas nuestro profundo y eterno agradecimiento al diario la nacion y, personalmente, a Claudio Escribano, por regalarnos semejante homenaje a la persona que nos ha marcado para siempre por sus valores de familia, amistad, honestidad y de servicio público. También sumar a todos sus amigos, correligionarios y personas cercanas, por sus mensajes de acompañamiento en estos días.

Papá fue una persona que dejó todo por su querido país y por su amada ciudad de Buenos Aires; el repaso de su trayectoria política, tanto en la Unión Cívica Radical como por los diferentes cargos públicos que ejerció, habla de su vocación de servicio por la patria y por el bien común de las personas.

Nacimos y crecimos en casa con la imagen de Papá leyendo el diario la nacion cada mañana de nuestras vidas, hasta el último de sus días. Por eso, en nombre de nuestra madre, Inés Vernet, sus hijos, hijos políticos y sus 29 nietos, volvemos a decirles gracias por recordarlo como lo que fue, un SEÑOR, con mayúsculas.

Ine, Ale, Cofla, Memi, Tincho y Moro Moreno Hueyo

Vergüenza

“Es una vergüenza internacional que el presidente Milei le niegue el saludo al jefe de gobierno de CABA”, gritan a los cuatro vientos los que se robaron las vacunas y organizaban fiestas en la residencia presidencial mientras morían miles de argentinos.

Juan Maurette

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Deterioro de las rutas

Un reciente informe del Colegio de Ingenieros de la provincia de Buenos Aires señala “el grave deterioro de la infraestructura vial”. Por su parte, Vialidad Nacional relevó el estado actual de más de 19.000 kilómetros de rutas nacionales, concluyendo que el 47.5% (9000 kilómetros) alcanzaba la calificación de “bueno”, mientras que el 29% (5563 kilómetros) resultaba “malo” y un 23,5% (4500 kilómetros) aparecía “regular”. Los constantes accidentes que se producen en nuestras rutas, con numerosas víctimas mortales, acreditan lo manifestado por ambas entidades. Sin embargo, las autoridades nacionales parecen no darse por enteradas. El cuadro descripto afecta la comunicación, el transporte de mercaderías y el turismo, con las consecuencias económicas que esto significa. No se puede interrumpir el mantenimiento de las rutas argumentando la ineficiencia de la obra pública. En todo caso, se deben mejorar los controles que se practican sobre esos trabajos y esta es una obligación insoslayable de las autoridades nacionales. Cualquier alumno de los primeros años universitarios conoce el efecto multiplicador que tiene la obra pública, ocupando mano de obra, impulsando la fabricación de insumos, mejorando la calidad de vida de los ciudadanos. Sin embargo, el gobierno nacional, ignorando esos beneficios, cortó abruptamente la obra pública, sin detenerse a mirar las consecuencias de esa medida.

Reitero, se trata únicamente de mejorar los controles sobre los trabajos que resultan imprescindibles para mejorar nuestras rutas y ofrecer adecuadas condiciones de seguridad a quienes las transitamos.

Evaristo Spallanzani

DNI 8.296.830

Desconocimiento

Poner en duda el valor de las vacunas para la prevención de enfermedades o la existencia de un problema climático que amenaza al planeta, provocado por el calentamiento global, es carecer de conocimientos elementales que pueden, eventualmente, convertirse en un peligro en manos de funcionarios públicos poco informados, cuya función es, precisamente, cuidar a la comunidad. En una sociedad bien organizada, la función pública debe ocuparse, en base a conocimientos científicos demostrados y adquiridos durante muchos años, de la salud y seguridad de la población, sin recurrir a fórmulas improvisadas, con posibles consecuencias irreparables.

Silvio Kremenchuzky

skremenchuzky@ gmail.com

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