Patricia Bullrich quiere hacer un alambrado de 200 metros en la frontera de Salta con Bolivia para frenar el ingreso de cocaína.
El alambrado de 200 metros irá desde la terminal de micros del pueblo Aguas Blancas hasta los puestos de control del Puerto de Chalanas. De este modo se cubrirá el 0,02% de la frontera entre ambos países, que es de 724 kilómetros.
Si bien el Gobierno de Salta lanzó la licitación para instalar el alambrado por medio del llamado «Plan Güemes», Bullrich busca adjudicarse la medida para hacer una paralelismo con Donald Trump y su muro en la frontera estadounidense con México.
«Del lado boliviano se construyeron controles estrictos, pero del lado argentino no había una delimitación clara», dijo Virginia Cornejo, directora Nacional de Vigilancia y Control de Fronteras del Ministerio de Seguridad, en diálogo con El Tribuno.
Curiosamente el gobierno reactivaría la obra pública con el alambrado olímpico, que está lejos de la grandilocuencia del muro que Trump comenzó a construir durante su primer mandato para frenar la inmigración ilegal. El republicano había prometido un muro de hormigón armado pero finalmente se optó por bolardos, que son unas barras de acero verticales.